LA CEIBA
Hace más de 10 años los vecinos de 12 colonias tenían que salir corriendo de sus hogares cuando el río Danto crecía por las lluvias, porque la corriente inundaba sus casas.
Debido a esta calamitosa situación, decidieron conformar un comité pro construcción del bordo del río Danto, con personería jurídica, lo que les permitió gestionar los fondos necesarios para construir el muro de contención con gaviones.
Una vez hecha la obra central, este comité siguió trabajando liderados por el dirigente Nelson Espinal. Hicieron rifas, barbacoas y otras actividades para recaudar fondos y fue así como lograron construir un puente sobre la quebrada de Adán.
Sin embargo, Espinal, al observar que el río Danto se retiró varios metros del bordo, visualizó que en esta área arenosa se podía hacer algo más y comenzó a tejer un sueño: construir un parque ecológico.
Con la ayuda de todos sus vecinos, sembraron una gran variedad de árboles como caobas, mangostín, maya maya, moluca y una variedad de especies frutales.
Han pasado los años y los árboles crecieron. El río Danto se ha desbordado sobre este terraplén, pero los árboles siguen en pie, dándole protección a la comunidad.
Con orgullo, Espinal ha formado una microempresa conformada por sus vecinos pertenecientes a las 12 colonias y ahora trabajan por un sustento y por un ambicioso proyecto ecológico.
Aunque falta mucho trabajo por delante, en las 2.5 manzanas ya existe una cancha de fútbol, un atracadero de lanchas y canoas y se sigue reforestando.
Espinal asegura que la idea es terminar de construir el parque ecológico para que sirva de esparcimiento a toda la población ceibeña.
A corto plazo se piensa construir gradas que daría acceso a la cancha de fútbol y baloncesto, e instalar luminarias; un pequeño muelle de madera para las canoas y las bicicletas acuáticas.
"Ya tenemos listas varias canoas y dos bicicletas acuáticas de pedales para que la gente venga a pasear por el río Danto hasta la desembocadura del mar Caribe, hacen ejercicio y se divierten sanamente", explica.
Valentín Ordóñez, presidente del patronato de la colonia Satélite, sostiene que este proyecto al principio sólo era un sueño de la comunidad, pero ahora poco a poco ven como toma forma.
"Queremos darle vida a este sector, para los niños, para la familia, para que vengan a disfrutar de un día de pic-nic, de una barbacoa a la orilla del río sin que tengan que pagar nada", asegura Ordóñez.
El alcalde municipal, Carlos Aguilar, visitó el proyecto y quedó impresionado. Hay mucho espacio, mucha vegetación y a escasos metros, se llega al río Danto, donde la gente podrá pescar, nadar o pasear en canoas.
El edil ceibeño prometió al comité, pavimentar la calle de acceso, ubicada por la antigua sede del club Vida y que conecta con el puente Danto, salida hacia el puerto de Tela.
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